Fracaso electro-energético

Por José Aguilar / Ingeniero / jgasaguilar@hotmail.com y @800GWHMWH

Llegar a la Presidencia es el más alto honor de la nación para con un ciudadano, para ello se deben producir resultados que sean cónsonos con las promesas hechas para alcanzar el poder

A 79 días de la elección, el fracasado de Miraflores, no ha podido con la crisis que todavía mantiene a gran parte de Venezuela a oscuras, pese haber "invertido" 42 mil millones de dólares desde enero 2010 y haberle esquilmado de su bolsillo otros mil 800 millones de bolívares en multas ilegales.
Llegar a la Presidencia es el más alto honor de la nación para con un ciudadano, para ello se deben producir resultados que sean cónsonos con las promesas hechas para alcanzar el poder. Veamos cuáles son las credenciales energéticas del que aspira a gobernarnos indefinidamente, qué ofreció, qué cumplió y qué ofrece para los próximos seis años.

En los últimos 32 meses el Presidente ofreció al país 12 mil 624 MW, cumplió con dos mil 736 MW (21,6 %) y ofrece para el próximo período 21.078 MW más. En transmisión y distribución no llega a tres mil km de líneas en 14 años, pero ahora ofrece 27 mil 247 km en nuevas líneas.

En refinación ofrece, nuevamente, las 15 refinerías que no ha concluido y modernizar a tres más, mientras que importamos la gasolina y tras hacerse la vista gorda con el contrabando, usted tiene ahora un chip.

Tal demagogia, es una burla más a su buena fe, un insulto a sus aspiraciones y la de sus hijos. El costo de la propuesta, sin corrupción es 350 mil MM US$ en seis años. Vale preguntar ¿por quién toma a los venezolanos? ¿De dónde va a sacar los reales con la regaladera y despilfarro que es su constante accionar?

Ni corto ni perezoso en un acto de viveza, admite que falló sin decirlo y que por lo menos requiere de tres años más para tener el gas y la electricidad, es decir, concede razón a los técnicos.

Es vital vencer la amnesia social. Prohibido olvidar el abuso, el engaño y las calamidades que este Presidente trajo al país. Nuestra pasión democrática va a una prueba de fuego. Falta poco, usted decide ¡Manos a la obra, que sí se puede!