Insuficiencia de combustibles limitará proyectos eléctricos

Gobierno podría "dejar por fuera" necesidades del sector privado

Afirman que de no conciliarse una planificación conjunta entre sectores petrolero y eléctrico se profundizará la crisis ARCHIVO

MARIELA LEÓN |  EL UNIVERSAL (03-07-11)

"El incumplimiento de planes y la alta politización", en las industrias petrolera y eléctrica durante los últimos años, genera para el país "una pérdida de seguridad energética" de comprometidas dimensiones.

Sostiene Nelson Hernández, profesor de postgrado de Economía y Políticas Energéticas de la Universidad Metropolitana, que de ser reconocida como una potencia energética, Venezuela presenta importantes rezagos en inversiones, ejecución de obras y mantenimiento de equipos, que disminuyen su capacidad para satisfacer los nuevos desafíos del país en sus proyectos de desarrollo.

Señala que por no aligerarse "los desembolsos previstos en mantenimiento y expansión en la producción de electricidad, durante los doce años de gobierno, a partir de 2007 se inicia una caída de la capacidad instalada efectiva de generación por persona, que en esa fecha se ubicó en 811 vatios/habitante y en 2010 fue de 705 w/hab".

De haberse seguido la tendencia creciente, detenida hace cuatro años, ese índice debió situarse en 865 vatios/habitante el año pasado, indica el especialista. "Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), la población creció en 6 millones de personas durante la actual Administración, esto es equivalente a decir, que todos los años, nace un estado Yaracuy, al cual hay que proveerlo de los servicios básicos (electricidad, salud, agua, vivienda y educación), acción que no se realizó, trayendo como resultado el colapso de los mismos".

"Ese diferencial de 160 vatios por habitante", dice el analista, "entre lo que debió ser y la realidad, es lo que ha originado la crisis eléctrica en generación, con el consecuente racionamiento a la población, desmejorándole su calidad de vida, sin dejar a un lado la afectación a la economía, específicamente al sector productivo, al comercio y los servicios".

Hernández considera que ante la ausencia del conocimiento de la crisis eléctrica, las autoridades modifican continuamente los planes" para resolver problemas puntuales y no una solución definitiva.



En profundidad

De acuerdo a la última meta de generación difundida por el Gobierno para el período 2011-16, "se hace necesario instalar 8.550 megavatios (Mw) nuevos, los cuales requieren un suministro de combustibles eléctricos de 248 mil barriles diarios de petróleo equivalente, que sumandos a los 295 de 2010, hacen un consumo nominal total de 543 mil barriles para el 2016".

Aclara el profesor que en esas cifras no está incluida la demanda de electricidad asociada a la Gran Misión Vivienda, que prevé la construcción de 2 millones de viviendas en 6 años. "Tomando como valor de 500 kilovatios hora (kWh) mensual por vivienda, es necesario instalar 2.100 Mw, a estos hay que agregarle la demanda de otros usuarios para atender a esa población que la habitará y que para efecto de planificación se considera un 50% por encima de la demanda por vivienda, que sería 1.050 Mw".

El total a instalar para las nuevas viviendas sería del orden de 3.150 Mw, lo que aumentaría el suministro de combustibles eléctricos a 635 mil barriles diarios de petróleo equivalente para 2016. En su opinión si no se logra una planificación estrecha entre los sectores hidrocarburo y eléctrico, "tendríamos la instalación de nuevas plantas termoeléctricas sin poder generar por falta de combustibles, con lo cual la crisis eléctrica se profundizaría".

Al margen

Advierte que el Gobierno, para solventar la contingencia eléctrica en el corto plazo (2011-12) planifica instalar 2.500 Mw, los cuales elevarían la demanda de diesel en 83 mil barriles diarios en comparación con lo consumido en 2010.

El especialista refiere que el Plan de Refinación Siembra Petrolera 2006-12 contempla la construcción de tres refinerías: Caripito, Batalla de Santa Inés y la de Cabruta, "en ninguna se han iniciado los trabajos, lo que implica que en los próximos cuatro años (tiempo necesario para construir una refinería) no se ampliará la capacidad de producción de diesel".

Apunta que otro factor del aumento del consumo de diesel en los últimos dos años y, como consecuencia de la crisis energética, "es la autogeneración eléctrica a la cual ha tenido que acudir el sector productivo nacional (industria y comercio). No se tiene una cifra oficial sobre esa capacidad de autogeneración, sin embargo se estima entre 100 y 150 Mw, para un consumo promedio de 3.860 barriles diarios; es de acotar que el 13 de junio, con el anuncio de nuevas resoluciones dirigidas a reducir el consumo eléctrico, el Gobierno obligó al sector productivo a autogenerar".

En este escenario de déficit de combustibles eléctricos, dice Hernández, "existe alta probabilidad de que el gobierno deje por fuera al sector privado, es decir, que le restrinja o le niegue el suministro de diesel o se lo suministre a precio internacional. esto sería un impacto para el aparato productivo".

Recuerda que ya en 2010, el gobierno había dado pasos en ese sentido. "El sector privado tuvo que acudir a la importación de diesel, fuel oil, gas natural, alterando sus economías. Actualmente la producción de diesel no cubre la demanda".