Rafael Gallegos
El
2014, el pozo Zumaque1 cumplirá cien
años. O sea… cien años de explotación comercial del petróleo en Venezuela. Hora
de balance, de reflexión. De filosofar acerca de nuestra realidad petrolera.
¿El
petróleo, palanca o valla? Las respuestas son disímiles. Algunos parafrasearán a nuestros indígenas:
el petróleo es el excremento del diablo.
Otros
afirmarán la Leyenda Negra: el
petróleo es el culpable de todos nuestros males. Dirán que si no tuviéramos
petróleo seríamos como Alemania, cuando todos sabemos que no hay ninguna razón
para que sin petróleo, fuéramos diferentes a tanto pobre país latinoamericano.
No
faltará quien defienda la Leyenda Rosa: somos
un país inmensamente rico. La realidad es que nos asemejamos más a un
frustrado alquimista que no logra dar con la piedra filosofal, que le
permita transformar el petróleo en bienestar colectivo.
Pero
ni blancos, ni negros… grises son los colores de la vida. El petróleo nos ha
traído mucho bienestar acompañado de muchos perjuicios. Y el balance está lleno
de altibajos.
Ni
bueno ni malo. Simplemente somos un país petrolero. El único miembro importante de la OPEP, en el mundo occidental. Lo
fundamental del balance, es sacar lecciones para lograr que el petróleo que nos
queda, además de sus tres mil productos, genere el derivado 3001: el bienestar de los venezolanos.
A
partir de 1.928, el petróleo se convirtió en nuestro generador de divisas más
importante. Y Venezuela comenzó un
crecimiento sostenido por más de treinta años.
Desde
la muerte de Gómez hasta el boom petrolero del primer gobierno de Carlos Andrés
Pérez, desaparecieron enfermedades endémicas, la estatura del venezolano subió
significativamente, al igual que el consumo de alimento per cápita, los niveles
educativos, las escuelas, las universidades, los hospitales, autopistas. Guri, CVG, desarrollo agroindustrial, clase media, ciudades,
el sureste de Caracas. Pasamos de una a otra Venezuela.
Ah! y a excepción de los diez años de la
dictadura militar… vivimos en democracia.
Con todos sus defectos, Venezuela llegó a ser un país modelo en Latinoamérica.
EFECTO VENEZUELA
En
1974 se multiplicaron los precios del petróleo. El primer presupuesto de CAP
triplicó al último de Caldera. Venezuela pasó a manejar más dinero del que
podía. Pérez Alfonzo determinó que el
país se iba a indigestar con tanto
dinero, cual individuo que ganara el premio gordo de la lotería y comenzara a comer siete veces al día… hasta
la descompensación. A este fenómeno lo
denominó Efecto Venezuela.
Propuso
bajar la producción hasta 1 millón de barriles. El gobierno por su parte, creó el Fondo de Inversiones de Venezuela (FIV)
para represar los dólares excedentarios.
Venezuela
se deslumbró. En el extranjero teníamos un poder adquisitivo equivalente al de
un sueco, cuando en el fondo nuestra productividad no superaba a la de
cualquier país latinoamericano. La Tribu Ta Barato. La riqueza del Estado
arropó la creciente improductividad del país. La deuda externa llegó a niveles
impagables. Tanto recurso deformó a
Venezuela. Nos indigestamos.
Nos
parecimos más a Sodoma y Gomorra, que a un país productivo. El Estado tenía que
darnos todo. Se multiplicó la burocracia, las importaciones, la corrupción. Se
aflojaron los resortes morales. Creció la marginalidad. La renta dejó de ser
suficiente.
La
anti política se puso de moda y dejamos- en general- la política a los más
incapaces.
Inflación,
deuda, descomposición. A los líderes emergentes se les bloqueó el camino. El
país, desmoralizado, dejó de creer en sí y en la democracia.
4 DE FEBRERO
Y
llegó el comandante Chávez y mandó a parar. Cabalgó sobre el fracaso colectivo.
En lugar de soluciones, ofreció venganza. Y el pueblo… aplaudió.
Miles
de millones de dólares. Otro Efecto Venezuela. Más largo, más profundo y más
dañino. Ahora la renta, sirve… para desbaratar al país para comerte mejor.
Por
lo menos los otros eran demócratas. Y no
le entregaron el país al totalitarismo cubano.
Así,
hemos llegado a este despeñadero.
PRIMER EPÍLOGO
1.-
¿Por qué los países con recursos mineros
no se desarrollan? La realidad nos va demostrando que el único recurso que desarrolla es la inteligencia. La libre empresa,
la orientación a las exportaciones, las estrategias de desarrollo adelantando
agresivas políticas sociales.
2.-
Hay que estar claros en que el petróleo no es riqueza. Apenas
dólares que sirven para cualquier cosa. Nuestro deber es gerenciar los recursos petroleros. Todo lo
contrario de lo que hace esta “revolución”.
3.-
Tenemos que hacer las cosas de manera
diferente a como hasta ahora. Para lograr resultados diferentes.
4.-
¿Podremos? … no se pierda la segunda
parte de este artículo.
2013,
es nuestra próxima oportunidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario