Gustavo Coronel
Dentro
de unos días cumpliré 80 años. Con la tendencia que tenemos los seres
humanos de sobrevalorar nuestros asuntos, veo ese día como muy especial.
Estadísticamente, sin embargo, no tiene mucho significado, considerando
los millones que han llegado a ese día en el pasado y los millones que
lo verán llegar. Es un logro de sobrevivencia que nos hace
olvidar, momentáneamente, el esencial misterio de nuestras vidas:
representan un simple accidente biológico o un acto divino de creación ?
Ya
hace tiempo que dejé de obsesionarme por esa interrogante y me he
limitado a vivir la vida de la manera más armoniosa posible con lo que
me rodea: otros seres humanos y la belleza de la naturaleza y de sus
tres mundos: el mineral, el vegetal y el animal . En especial, aprecio
ahora mucho más a los niños y a los animales. He llegado a creer en las
palabras de Woodsworth: “El niño es el padre del hombre” y me maravilla
ver, gracias a la televisión y la fotografía, la inteligencia y el sentido de la bondad y solidaridad que exhiben muchos animales.
Veo hacia atrás y mi vida pasada parece, en ocasiones, un breve sueño y
otras veces una eternidad. Puedo decir que su constante ha sido la
felicidad. Como Hans Castorp, el jóven enfermo de “La Montaña Mágica” de
Thomas Mann, me he sentido siempre “un niño mimado por la vida”. Cada
etapa ha sido extraordinaria, desde la niñez hasta hoy, con sus
aventuras y éxitos, a pesar de algunos fracasos y de la pérdida de seres
queridos.
Como ha sido ello posible? De
antemano les aconsejo que no le hagan caso a quien les haga creer que
hay una fórmula universal para la longevidad o para la felicidad. Cada
quien se hace su fórmula y esa fórmula solo le funciona a esa persona,
no a otros, porque debe ser hecha a la medida, no es un pret- á- porter.
Lo que si puede existir es una aproximación general a los ingredientes,
pero la dosis de cada ingrediente será siempre a la medida individual.
Cuales son algunos de esos ingredientes de una fórmula para la felicidad ?
Primeroque todo, el matrimonio no es indispensable pero como ayuda!
Primeroque todo, el matrimonio no es indispensable pero como ayuda!
1. Tener una brújula moral compuesta de los principios y valores que aprendimos en la escuela y en el hogar y no perderla
2. No entregar esos
principios y valores por pretender obtener beneficios materiales. Quien
hace la pequeña entrega está en camino de hacer la grande. Nunca
podremos engañar a nuestro corazón
3. Sentirse cómodo interactuando con humildes y poderosos, porque todos tenemos un substrato de sencillez
4. Llegar a nuestras propias conclusiones, sin aceptar a priori la conclusion a la cual puedan llegar otros, no importa cuan importantes
5. Vivir en nuestros propios términos. Nadie nos conoce mejor que lo que nosotros nos conocemos
6. Llegar
a desear esencialmente lo que podemos obtener. Somos un punto en una
gradación infinita, en la cual siempre habrá quienes tengan “más” y
quienes tengan “menos”
7. Descubrir temprano en nuestra vida el placer de dar y el valor del gran gesto
8. Andar siempre tatareando una melodía
9. Desear ser apreciados, para lo cual, como decía Adam Smith, es preciso esforzarse en ser apreciables
10. Ejercitar la cortesía y ver como es correspondida con creces con la cordialidad
11. Desear
aprender algo nuevo cada día. Esto me lo decía Arturo Uslar Pietri ,
como respuesta a mi pregunta de como lograba mantenerse tan alerta cerca
de los 90.
Y
sobre la longevidad? Eso también es algo muy individual, muy
relacionado con nuestros genes. Vi morir jóvenes a grandes amigos, solo
porque sus padres habían muerto jóvenes. Y hay otros quienes,
afortunadamente, están tan duros a los 85, como un
sancocho de tuercas. Tomás Parr, el longevo que figura en las botellas
de Old Parr, le aconsejaba a Isabél I mantener la cabeza fría y los piés
calientes. El gran médico, Enrique Tejera Guevara, me recomendaba comerme un pedazo de chocolate antes de acostarme.
Lo
que si es cierto es que una vida breve pero feliz* puede ser más
satisfactoria que una larga vida de sufrimiento. Quienes pueden combinar
las dos cosas, por supuesto, están hechos.
*No confundir con “una vida breve pero intensa”, porque Modigliani fue muy desgraciado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario