NO MAS PRESOS POLITICOS NI EXILIADOS.
Juan Fernandez
Recordaremos este día la Firma del Acta de la Independencia de nuestro país, algunos historiadores señalan que en realidad se redacto entre la madrugada del 5 al 6 de 1811. Hoy prácticamente a 200 años de aquellos hechos históricos, vivimos en un país sumido en las peores crisis de su historia republicana, con un régimen caracterizado por separar a los venezolanos. ¿Somos un país libre en pleno siglo XXI?, es quizás la pregunta que nos debemos hacer todos.
Desde mi perspectiva actual del exilio, la respuesta es NO, no somos libres, ni independientes. Hoy luego de más de una década de la supuesta revolución somos un país intervenido, por una fuerza de ocupación de más de 60.000 fidelistas, cuyo objetivo no es otro que lograr ese sueño absurdo del Comandante Fracaso de hacer la VeneCuba, pero además con un gobierno controlador de todos los poderes públicos, es decir TOTALITARIO.
El modelo de vida que se nos viene imponiendo, ahora de forma acelerada es una copia al carbón del modelo castrista, que luego de 50 años en el poder demuestra el fracaso, lo obsoleto y viejo de sus políticas, en donde la pobreza es el símbolo demostrable por doquier en la Cuba de hoy en día y es hacia allí adonde nos quiere llevar el llamado socialismo del siglo XXI, imposible entonces pensar que vivimos bajo los ideales libertarios de los padres de la patria, es una Utopía.
Solo pensar que en algún momento pasado de la democracia venezolana 60.000 extranjeros provenientes de cualquier otro gobierno estuviesen ejerciendo actividades en áreas sensibles como identificación, militar, economía, política exterior, etc. Sería impensable y la reacción de todo el país político y civil seria contundente, pero sobre todo el militar en donde el orgullo de la patria es lo primero.
Las palancas las cuales el país disponía para hacer crecer la economía, multiplicar y crear valor como es el caso de PDVSA, tienen resultados acordes a una gerencia incompetente, llena de corruptelas. En consecuencia cuando en 1998 PDVSA era la empresa mas importante de América Latina, modelo a seguir por muchos, hoy en día desplazada por PETROBRAS, la empresa petrolera del Pana Lula. No obstante, seguimos siendo totalmente dependientes del ingreso petrolero y el gobierno todo poderoso limita a su antojo las posibilidades del desarrollo, pero hoy en día cada vez con menos posibilidades por la destrucción de PDVSA.
La educación elemento vital para el desarrollo del país, pues en el mundo globalizado de hoy, es el CONOCIMIENTO un instrumento muy valioso para desarrollarse, en una sociedad de múltiples pensamientos en conde el norte es la visión compartida del país que nos merecemos. Resulta que nuestro país se descapitaliza de sus recursos humanos en los cuales el país invirtió pues día a día ya muchos lamentablemente buscan en otros horizontes un mejor vivir, llegando a convertirnos en un país de emigrantes, exiliados y perseguidos políticos.
Hoy cercanos a los doscientos años del aquel 5 de Julio 1811, los ideales de justicia que forman parte de la libertad, están ausentes. Por lo tanto, sin Justicia no puede haber libertad.
He de insistir la responsabilidad que tenemos todos de recuperar la libertad, la justicia y por ende la Democracia, en el país. La confusión generada por algunos, en cuanto a que todavía se vive en democracia y hay un régimen de libertades, hace permanecer a muchos en la olla en donde nos sancochan.
Juan Fernandez
Recordaremos este día la Firma del Acta de la Independencia de nuestro país, algunos historiadores señalan que en realidad se redacto entre la madrugada del 5 al 6 de 1811. Hoy prácticamente a 200 años de aquellos hechos históricos, vivimos en un país sumido en las peores crisis de su historia republicana, con un régimen caracterizado por separar a los venezolanos. ¿Somos un país libre en pleno siglo XXI?, es quizás la pregunta que nos debemos hacer todos.
Desde mi perspectiva actual del exilio, la respuesta es NO, no somos libres, ni independientes. Hoy luego de más de una década de la supuesta revolución somos un país intervenido, por una fuerza de ocupación de más de 60.000 fidelistas, cuyo objetivo no es otro que lograr ese sueño absurdo del Comandante Fracaso de hacer la VeneCuba, pero además con un gobierno controlador de todos los poderes públicos, es decir TOTALITARIO.
El modelo de vida que se nos viene imponiendo, ahora de forma acelerada es una copia al carbón del modelo castrista, que luego de 50 años en el poder demuestra el fracaso, lo obsoleto y viejo de sus políticas, en donde la pobreza es el símbolo demostrable por doquier en la Cuba de hoy en día y es hacia allí adonde nos quiere llevar el llamado socialismo del siglo XXI, imposible entonces pensar que vivimos bajo los ideales libertarios de los padres de la patria, es una Utopía.
Solo pensar que en algún momento pasado de la democracia venezolana 60.000 extranjeros provenientes de cualquier otro gobierno estuviesen ejerciendo actividades en áreas sensibles como identificación, militar, economía, política exterior, etc. Sería impensable y la reacción de todo el país político y civil seria contundente, pero sobre todo el militar en donde el orgullo de la patria es lo primero.
Las palancas las cuales el país disponía para hacer crecer la economía, multiplicar y crear valor como es el caso de PDVSA, tienen resultados acordes a una gerencia incompetente, llena de corruptelas. En consecuencia cuando en 1998 PDVSA era la empresa mas importante de América Latina, modelo a seguir por muchos, hoy en día desplazada por PETROBRAS, la empresa petrolera del Pana Lula. No obstante, seguimos siendo totalmente dependientes del ingreso petrolero y el gobierno todo poderoso limita a su antojo las posibilidades del desarrollo, pero hoy en día cada vez con menos posibilidades por la destrucción de PDVSA.
La educación elemento vital para el desarrollo del país, pues en el mundo globalizado de hoy, es el CONOCIMIENTO un instrumento muy valioso para desarrollarse, en una sociedad de múltiples pensamientos en conde el norte es la visión compartida del país que nos merecemos. Resulta que nuestro país se descapitaliza de sus recursos humanos en los cuales el país invirtió pues día a día ya muchos lamentablemente buscan en otros horizontes un mejor vivir, llegando a convertirnos en un país de emigrantes, exiliados y perseguidos políticos.
Hoy cercanos a los doscientos años del aquel 5 de Julio 1811, los ideales de justicia que forman parte de la libertad, están ausentes. Por lo tanto, sin Justicia no puede haber libertad.
He de insistir la responsabilidad que tenemos todos de recuperar la libertad, la justicia y por ende la Democracia, en el país. La confusión generada por algunos, en cuanto a que todavía se vive en democracia y hay un régimen de libertades, hace permanecer a muchos en la olla en donde nos sancochan.
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