Nelson Hernandez
En este video, una sencilla explicacion de la mayor piramide legal financiera que se haya realizado y que trajo como consecuencia la actual crisis financiera por la que atraviesa el mundo....
Usted sin duda ha oído hablar de ellas. Ojala nunca haya participado en ellas. Tuvo mucho éxito en los ochenta y un discreto repunte a finales de los noventa. Se trata de la pirámide financiera que, con distintos nombres y normas, circuló por medio mundo.
Los esquemas piramidales se basan en que una persona reclute a varias más y reciba de cada una de ellas una cantidad de dinero. Estas, a su vez, deberán reclutar a otras, y como cada uno cobra diversas comisiones de los ocho o diez niveles siguientes, termina por ganar mucho más de lo invertido, llegando en ocasiones a obtener cantidades muy elevadas. Algunas personas se han hecho verdaderamente ricas, pero nadie ha perdido más de unas decenas de dólares.
Naturalmente hubo esquemas piramidales fraudulentos, concebidos desde el principio para vaciar los bolsillos de los incautos y despojarles impunemente de unas cantidades tan pequeñas que no motivarían denuncia ni pleito alguno pero que, sumadas, harían rico al delincuente de turno.
El peor fraude fue el de algunos bancos albaneses que instauraron a mediados de los noventa sistemas de inversión sin respaldo, parcialmente basados en las pirámides clásicas, empobreciendo a miles de ciudadanos del ya de por sí paupérrimo país mediterráneo. Sin embargo, la mayoría de los esquemas piramidales fueron bastante simples y transparentes, y funcionaron con una ética a prueba de bombas. No había engaño.
Todo el mundo sabía desde el principio cuál era el mecanismo de funcionamiento del sistema, sin cláusulas ocultas ni procesos desconocidos. Todos sabían que ganarían más o menos dinero según reclutaran a más o menos gente y, sobre todo, dependiendo del éxito reclutador de sus "descendientes" en el sistema. ¿Por qué, entonces, se lanzaron campañas de difamación en la prensa contra todos los esquemas piramidales, generalizando de manera injusta? ¿Por qué los gobiernos persiguieron por igual las estafas y los esquemas limpios en los que todo el mundo cumplía con lo acordado? Un principio liberal-libertario de la Justicia afirma que sin víctima no hay delito, que no se puede condenar actividades humanas voluntarias si no afectan a terceros y nadie sale perjudicado de ellas.
Las pirámides financieras tienen un primo lejano en las empresas que comercializan sus productos o servicios mediante el sistema de multinivel. Entre ellas hay marcas tan conocidas como Amway o Herbalife. Es lamentable el empleo por parte de algunas empresas de multinivel de técnicas de motivación duras que en ocasiones tienen efectos nocivos sobre la psicología de algunos de sus nuevos distribuidores.
Lo que no es cuestionable es el excelente resultado de la venta por multinivel, tanto para las empresas como para los miles de vendedores reclutados. Pues bien, también contra este tipo de comercialización han intervenido muchos gobiernos, legislando normas que limitan el alcance y las características del negocio.
Recuerde... el dinero no se consigue o se gana facil... Hay que trabajar.
En este video, una sencilla explicacion de la mayor piramide legal financiera que se haya realizado y que trajo como consecuencia la actual crisis financiera por la que atraviesa el mundo....
Usted sin duda ha oído hablar de ellas. Ojala nunca haya participado en ellas. Tuvo mucho éxito en los ochenta y un discreto repunte a finales de los noventa. Se trata de la pirámide financiera que, con distintos nombres y normas, circuló por medio mundo.
Los esquemas piramidales se basan en que una persona reclute a varias más y reciba de cada una de ellas una cantidad de dinero. Estas, a su vez, deberán reclutar a otras, y como cada uno cobra diversas comisiones de los ocho o diez niveles siguientes, termina por ganar mucho más de lo invertido, llegando en ocasiones a obtener cantidades muy elevadas. Algunas personas se han hecho verdaderamente ricas, pero nadie ha perdido más de unas decenas de dólares.
Naturalmente hubo esquemas piramidales fraudulentos, concebidos desde el principio para vaciar los bolsillos de los incautos y despojarles impunemente de unas cantidades tan pequeñas que no motivarían denuncia ni pleito alguno pero que, sumadas, harían rico al delincuente de turno.
El peor fraude fue el de algunos bancos albaneses que instauraron a mediados de los noventa sistemas de inversión sin respaldo, parcialmente basados en las pirámides clásicas, empobreciendo a miles de ciudadanos del ya de por sí paupérrimo país mediterráneo. Sin embargo, la mayoría de los esquemas piramidales fueron bastante simples y transparentes, y funcionaron con una ética a prueba de bombas. No había engaño.
Todo el mundo sabía desde el principio cuál era el mecanismo de funcionamiento del sistema, sin cláusulas ocultas ni procesos desconocidos. Todos sabían que ganarían más o menos dinero según reclutaran a más o menos gente y, sobre todo, dependiendo del éxito reclutador de sus "descendientes" en el sistema. ¿Por qué, entonces, se lanzaron campañas de difamación en la prensa contra todos los esquemas piramidales, generalizando de manera injusta? ¿Por qué los gobiernos persiguieron por igual las estafas y los esquemas limpios en los que todo el mundo cumplía con lo acordado? Un principio liberal-libertario de la Justicia afirma que sin víctima no hay delito, que no se puede condenar actividades humanas voluntarias si no afectan a terceros y nadie sale perjudicado de ellas.
Las pirámides financieras tienen un primo lejano en las empresas que comercializan sus productos o servicios mediante el sistema de multinivel. Entre ellas hay marcas tan conocidas como Amway o Herbalife. Es lamentable el empleo por parte de algunas empresas de multinivel de técnicas de motivación duras que en ocasiones tienen efectos nocivos sobre la psicología de algunos de sus nuevos distribuidores.
Lo que no es cuestionable es el excelente resultado de la venta por multinivel, tanto para las empresas como para los miles de vendedores reclutados. Pues bien, también contra este tipo de comercialización han intervenido muchos gobiernos, legislando normas que limitan el alcance y las características del negocio.
Recuerde... el dinero no se consigue o se gana facil... Hay que trabajar.
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