jueves, 7 de marzo de 2013

Gran apagón


José Aguilar

Compatriotas, debemos ponerle un parao a esta infamia. Debemos exigir urgentes soluciones, no se aceptan las rayadas excusas del sabotaje

El tema es serio y con ustedes paisanos zulianos, con Corpoelec engañando, multando, full de problemas electromecánicos; PDVSA limitada por Amuay y con el calor a millón, lo que nos espera es un rosario de apagones de no arreglar nuestro problema eléctrico.

En Zulia recibe el 20 por ciento de la demanda, fuera de Guayana. A Guayana la han sometido a la demanda desde 1987, además hay una política de estado que discrimina a la provincia para consentir la capital con MW, por lo tanto a la hora de que se tenga que racionar, el Zulia afrontará del 25 al 36 por ciento del racionamiento nacional.

Pero si los funcionarios del Gobierno fallido nos dicen que nos estamos ahogando en MW, ¿por qué entonces tenemos tantos apagones? La respuesta tiene varias aristas:
El Gobierno miente, luego existe. Se vale del apagón informativo. Tienen 842 días escondiendo la verdad del estado de salud del sistema eléctrico. No tienen los MW despachables para enfrentar la demanda que ellos mismos han estrangulado con multas, racionamientos y pésimo mantenimiento.

Son MW despachables, no MW disponibles. Los despachables son los permitidos por la infraestructura del SEN. La Transmisión solo permite 11 mil 500 MW hidroeléctricos. El resto tiene que salir de Oriente, Centro y Occidente, mayormente  termoeléctrico.

En 2013 Venezuela anticipa 19 mil 200 MW de demanda máxima. Necesitamos siete mil 700 MW térmicos, eso implica que PDVSA debe proveer un torrente de combustibles, después que Corpoelec supere sus problemas electromecánicos. Lo demás que diga el Gobierno es eso, puro cuento.

Todo lo anterior, requiere de mucho dinero que por corrupción y mala administración no tenemos. Esa es nuestra dura realidad, una tragedia que se mantiene. No arreglamos la generación, la transmisión y distribución también con problemas, así seguirán dando tumbos.

Compatriotas, debemos ponerle un parao a esta infamia. Debemos exigir urgentes soluciones, no se aceptan las rayadas excusas del sabotaje, alta demanda y excesivo calor. De nosotros depende, agarrar el toro por los cachos. ¡Manos a la obra, que si se puede!

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