jueves, 30 de agosto de 2012

Accidente en Amuay: Racionamiento en Puerta



Nelson Hernandez

Desde hace más de un año, producto de deficiencias gerenciales en la gestión de PDVSA, hemos venido alertando sobre la seguridad energética de Venezuela, tal como lo recoge el documento: Fracturada la Seguridad Energética en Venezuela.

En dicho documento no estaba contemplada la salida abrupta de operaciones de una refinería como ha sucedido con la Refinería de Amuay, producto del accidente ocurrido el 25-08-12. Este hecho pone como prioritario e importante la seguridad energética, la cual si antes estaba fracturada, hoy está en terapia intensiva.

La participación de la Refinería de Amuay dentro de los volúmenes refinados y productos obtenidos a nivel nacional es el siguiente:
  • ·         Capacidad de Refinación: 645 MBD, 49.6 % del total nacional, y el 68.0 % del total del complejo de Refinación de Paraguanà que es de 955 MBD
  • ·         Gasolinas y naftas obtenidas: 150 MBD, 43.8 % del total país
  • ·         Diesel y destilados Obtenidos: 145 MBD, 43.3 % del total nacional
Cabe destacar que el resto de las refinerías  del país no pueden satisfacer los requerimientos de gasolinas, ya que su producción es de 192 MBD y la demanda nacional es de 290 MBD. Con respecto al diesel estás producen 189 MBD, lo cual puede en teoría cubrir la demanda que es del orden de los 190 MBD. En ambos casos se tendría que dejar de exportar estos tipos de combustibles.

Por otra parte, en la Memoria y Cuenta de Ministerio de Petróleo y Minería 2011 (Gestión PDVSA, pagina 384 (704)), se establece la  autonomía de almacenamiento para el consumo interno de los siguientes combustibles: Gasolina de 95, 1.32 MMB (8 días); Gasolina de 91, 1.87 MMB (15 días) y 2.35 MMB de diesel (13 días). Estos volúmenes corresponden a un consumo diario de 165 MBD, 124 MBD y 180 MBD, respectivamente. 

Al día de hoy, 30-08-12, (6 días después del accidente) la refinería de Amuay ha dejado de producir 0.9 MMB de gasolinas y 0.87 MMB de diesel. Estos volúmenes equivalen a una reducción de 2.7 días de autonomía (quedarían 5.3 días) de gasolina de 95 octanos, de 3.1 días de autonomía (quedarían 11.9 días) de gasolina de 91 octanos, y de 4.8 días de autonomía (quedarían 8.2 días) de diesel. 

La criticidad de la autonomía, obliga al gobierno a incrementar la importación de gasolinas y diesel (de hecho ya lo hace) a objeto de garantizar el suministro al mercado interno y/o establecer un racionamiento a nivel nacional. Esta importación que antes se consideraba de carácter coyuntural, se convierte en estructural, ya que la entrada en operación de Amuay no es de inmediato, y pasaran al menos 9 meses para que todo pueda regresar a la normalidad. Habrá que hacer una revisión de todas las infraestructuras (plantas, tanques, tuberías, etc.) de Amuay, ya que aun estando alejadas del sitio del siniestro estas pueden verse afectadas por la onda expansiva de la explosión y las altas temperaturas del incendio. De allí, el requerimiento técnico de su entrada paulatina.

Acompañando a esta criticidad energética, esta lo relacionado con el diesel y el sector eléctrico, el cual ha incrementado su consumo producto del déficit de gas existente. En el 2011 este sector consumió 72 MBD. Se espera que el consumo en el año 2012 sea de 133 MBD y de 195 MBD en el 2013. A esto hay que añadirle el consumo de los sectores transporte y agrícola, que en el año 2011 totalizaron 117 MBD.

Todo lo anterior repercute grandemente en las finanzas de PDVSA en dos aspectos: el lucro cesante (si no está asegurado) por la parada de la refinería de Amuay, y por el subsidio de los combustibles adicionales que tendrá que importar ( El precio de las energías en Venezuela)

Finalmente, el accidente en la refinería de Amuay modifico, por un tiempo prudencial, de una manera directa la logística de almacenamiento, despacho y comercialización, nacional e internacionalmente, de las gasolinas y el diesel por parte de PDVSA.

Ver: Fotos del Accidente de Amuay



La tragedia de Amuay


El Pais (30-08-12)
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"Algún filósofo dijo: la función debe continuar, con nuestros dolores y nuestros muertos”. Eso señaló Hugo Chávez durante su visita, el domingo, a la refinería de Amuay, escenario de la peor tragedia petrolera mundial en los últimos 25 años. Aún ardían los tanques y se contaban los cadáveres (que suman 48).
Es lógico que el mandatario venezolano quiera pasar página cuanto antes, dado que las elecciones presidenciales se celebran en cinco semanas. Pero hay dos reparos. Uno: que el accidente confirma la degradación de la estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa). Dos: que la “función” no acaba de ser apetecible. La catástrofe de Amuay sigue, en cuestión de días, al hundimiento del estratégico puente de Cúpira y al sangriento motín (otro más) en la cárcel de Yaré (25 muertos).
“¿Maldición gitana? ¿Castigo de Dios?”, se pregunta Fernando Rodríguez en el demoledor editorial de Tal Cual. Más bien “son los frutos de la gestión desastrosa”, dice, “de una pléyade de advenedizos que han manejado el país con los métodos administrativos de una cantina militar y la voracidad depredadora de un cardumen de caribes”. Y Gustavo Coronel, geólogo petrolero y crítico impenitente de la gestión de Pdvsa, responde al comandante presidente: “Millones de venezolanos están diciendo que el espectáculo debe terminar,  que esta pesadilla que Chávez ha llamado revolución debe terminar antes de que el país sea destruido completamente”.
Cunde la indignación entre los expertos y los medios críticos con el Gobierno, que hablan de negligencia criminal y exigen la dimisión del ministro de Energía y presidente de Pdvsa, Rafael Ramírez.
“En Amuay no se ha hecho mantenimiento durante 2012”, titula El Nacional, que echa mano de la Memoria de la propia petrolera: de las “nueve paradas de mantenimiento” previstas en Amuay el año pasado, solo se hicieron tres. Las demás se pospusieron a 2012, pero no se han llevado a cabo. Hubo en cambio “siete paradas no previstas” por fallos diversos, roturas y fugas de gases.
El economista José Toro Hardy desempolva en El Universal el informe ministerial de 2011, que menciona “los problemas técnicos” en la refinería “por desfase en los mantenimientos preventivos y el bajo nivel en el inventario de los repuestos”. Heraldo Sifontes, exgerente de Amuay, habla “del gigante caído”. Y el columnista Nelson Bocaranda aporta detalles sobre la fuga de gas que provocó la explosión, la falta de espuma antincendios o la contratación contrarreloj de personal cualificado para manejar el desastre. Faltan recursos, dice, pero “hay suficiente derroche de dólares para montar refinerías en Vietnam, Siria, Cuba o Brasil”.
11897970_copia_jpg_297_380La tragedia de Amuay, en su día una instalación puntera reconocida por sus estándares de seguridad, ha resucitado un acontecimiento decisivo en la historia petrolera venezolana: el despido de más de 20.000 empleados como represalia por la huelga de 2002 contra Hugo Chávez. La sangría de personal cualificado, y la gestión posterior, se traducen en cifras concretas. En una década, la producción de crudo de Venezuela ha bajado de 3,3 millones de barriles diarios a 2,9 millones (o 2,6 millones, según la corrección que hace la OPEP a los números del gobierno de Caracas).
En el proceso de convertir el petróleo en "instrumento de liberación en beneficio del pueblo" (en palabras del ministro Ramírez), la seguridad y las finanzas de Pdvsa han salido mal paradas. Varios medios reproducen la lista de accidentes registrados en las instalaciones del gigante petrolero. Ya el pasado abril, BBC Mundo ofrecía datos espeluznantes sobre el aumento de la siniestralidad. Otra interesante crónica de la misma cadena británica describe la transformación de Pdvsa en el principal instrumento de la política social (y clientelar) de Hugo Chávez. La petrolera invierte en proyectos gubernamentales el doble de dinero que en el sector del crudo. En cinco años, la plantilla ha pasado de 57.000 a 100.000 empleados, con un descontrol considerable. Y su deuda financiera, señala un reportaje de la agencia AP, se ha multiplicado por 12.
A la defensiva, el Gobierno ha reaccionado con un buen ataque y arremete contra la oposición y la prensa por querer sacar tajada de la tragedia. El vicepresidente, Elías Jaua, acusa al candidato presidencial Henrique Capriles de hacer “triste politiquería” y “necrofilia política”. Los delegados sindicales arremeten además contra la “canalla mediática”. Y todos piden que “no se politice” el accidente (lo que Teodoro Petkoff, director de Tal Cual, interpreta como que no se exijan responsabilidades).
Los medios oficialistas se centran en las medidas de apoyo a las víctimas, la exhaustiva investigación del “incidente”, como lo llama la agencia oficial de noticias; las “conmovedoras” fotos de la visita del presidente a los heridos, repartiendo abrazos y peluches.
Y además de negar la acusación de falta de mantenimiento, los allegados al chavismo esgrimen su propia teoría: dada la cercanía de las elecciones presidenciales, es inevitable sospechar de una conspiración. “Operación Amuay”, la bautiza Tulio Monsalve, columnista de El Correo del Orinoco, que señala directamente a la CIA. Diosdado Cabello, presidente de la Asamblea Nacional, y otros dirigentes del gubernamental Partido Socialista Unificado de Venezuela alertan de que hay una “campaña internacional” contra la petrolera. Y el partido Patria Para Todos, alineado con Chávez, tampoco descarta el sabotaje.

LA HORA DE CAPRILES



Rafael Gallegos                                                                      
Reloj no marques las horas, corean los “revolucionarios” aterrados porque saben que si hay algo escuálido en este mundo, es el tiempo que les queda. Reloj detén tu camino, siguen cantando a ver si se les da el milagro de que el reloj detenga al camino que ofrece el candidato de la democracia, Henrique Capriles.
Intentan imitar a Lucho Gatica. Lo único que le imitan es el apellido. Es lo que les queda del fiero tigre que tal vez  y sólo tal vez, fueron por allá en el siglo XX. Reloj detén tu camino, porque puede suceder.
Y júrelo, va a suceder.
Porque  la sarta de mentiras con que intentan engañar al pueblo ya no se las cree  nadie. La cadena de desastres es tan continua que parece a propósito. Los pranes, los muertos de las cárceles, el puente de Cúpira, los caminos rotos. Parece una película de terror.
Y en petróleo, vergüenza de vergüenzas. Rockefeller, el que dijo que el mejor negocio del mundo era una petrolera bien administrada y el segundo mejor negocio, una petrolera mal administrada… jamás pensó en una petrolera tan ineficiente como la que “rescató” la “revolución”.
Plan de Siembra Petrolera, bautizaron pomposamente su plan petrolero. Los derrames hacen pensar que como no podían sembrar el petróleo, decidieron derramarlo por los ríos del país. El coque de Jose, hace pensar que más bien lo han sembrado en los pulmones de los anzoateguienses.
Y ahora con la lamentable explosión de Amuay, al no poder buscar culpables más allá de lo obvio, dicen como Jaimito que más desastroso fue el por ellos denominado sabotaje petrolero. O sea, cuando la meritocracia petrolera se unió a la huelga general, entregando las instalaciones, notaría mediante.
No quieren reconocer que sabotaje, es la continua improductividad que ha dañado hasta niveles insospechados a nuestra empresa bandera, desde el 2003, año de la lobotomía empresarial. Que sabotaje es obligar a los técnicos petroleros a ser rojos rojitos, asociarse en la Faja con países que no tienen ni idea del negocio, descuidar el mantenimiento de las instalaciones y la formación de talentos, dañar los yacimientos, multiplicar por diez la deuda y disminuir entre dos la expectativa de producción. Un largo sabotaje de diez años. 
Como no quieren asumir su responsabilidad, no hayan a quien culpar por la explosión. En la investigación, por supuesto promovida por ellos y con la gente de ellos; “descubrirán” algún culpable. Tal vez sea la Gente del Petróleo por  haber dejado alguna válvula abierta en el 2002. O el imperio mediante algún avión sin piloto. O los paramilitares.
Usted es la culpable…la lista de culpables será más larga que las cadenas a las que el gobierno somete  a los que no tienen cable. Las investigaciones llegarán al mismo fondo a que llegaron con tanto derrame petrolero, con la comida podrida, o con la explosión de Cavim, y por supuesto será “hasta las últimas consecuencias”.
Y la culpa será de los adecos, de los copeyanos, de Fedecamaras, de Cedice, de la Gente del Petróleo, de Coener, de Betancourt, de Gómez… del “traidor” Páez. Hasta podrían culpar a la primera explosión: el Big Bang, pasando por Eva cuando mordió la manzana roja rojita. La lógica es rigurosa: sin Big Bang  no habría mundo y sin mundo no habría explosión. Ojalá no se les ocurra responsabilizar al Autor.
Han pasado de la desfachatez a la calamidad.
Pero ya no engañan a nadie. Todo el mundo sabe que cuando botaron “yoprovoqueleparo”  a los 23.000 petroleros, comenzó la indetenible caída de PDVSA, que hoy se refleja en baja de producción, importación de gas y de gasolina, derrames, explosiones.
Nadie les cree cuando dicen que PDVSA era manejada por una transnacional y que   gran parte de sus directores eran de la CIA. La gente añora la seriedad de la vieja PDVSA y deplora el amateurismo de hoy.

La gente sabe que es la “revolución” la que ha entregado la Faja a países que sin idea del negocio y por eso los tres mejoradores dañados y el bajón en la producción.
Y en cuanto a los 23.000 botados- a mucha honra- la gente sabe que los botó “yoprovoqueleparo”, con pito y todo, y que si estos estuvieran en la corporación, la producción sería cercana a 6 millones  de barriles diarios, no se derramaría tanto crudo, ni habría tantas explosiones. No me rescate compadre, habría que decirles.
Pero, les llegó la deshora. Ya los relojes se les tuercen, se adhieren a las paredes, se arrastran por el piso, como si los hubiera pintado Dalí. 
Reloj no marques las horas… cantan con Gatica. Pero el tiempo es indetenible. Les llega la hora de salida.
Una nueva generación tomará las riendas de Venezuela. Hoy, la encabeza Capriles.
Capriles Presidente. Es un deber patriótico. Hay que detener esta calamidad.

Petróleo: ¿para el progreso o el retroceso? (II)

Horacio Medina

En la nota precedente, expresamos la necesidad de plantearnos, de cara al futuro, la necesidad de elegir entre dos modelos de país y, por lo tanto, dos formas diferentes de aproximarnos a nuestra principal fuente de recursos, los hidrocarburos y desarrollar un modelo energético nacional. Esta semana, en nuestra nota, continuamos elaborando sobre el mismo tema, aun cuando, el accidente catastrófico ocurrido en la Refinería de Amuay, nos obliga a considerarlo, pero lo haremos en el contexto que indicamos.


Este terrible accidente ocurrido en la Refinería de Amuay que, junto con Cardón y Bajo Grande componen el denominado Centro Refinador de Paraguaná (CRP), nos duele profundamente, por la cantidad de fallecidos, quemados y heridos que se derivan de una devastadora explosión y, además, porque llevamos a la empresa muy dentro de nosotros.

En primer término, hemos sido propulsores junto a innumerables compañeros y amigos, de la colaboración y el apoyo de manera solidaria a las víctimas y a sus familias. Los trabajadores, guardias nacionales y residentes de la zona que han fallecido o sufrieron quemaduras, los heridos o afectados son venezolanos y la refinería de Amuay, también nos pertenece. Por tanto, es menester ofrecer, no solo nuestras condolencias y expresar nuestra solidaridad, debemos explícitamente colaborar en estos momentos difíciles que aun continúan presentes, más allá de haber sido extinguido el fuego en el patio de tanques de la refinería.

Tratando de ser lo más objetivo posible, debemos decir, que las operaciones en la industria petrolera, en todas sus áreas, tienen implícitas un alto riesgo. Sin embargo, también los rigurosos protocolos de seguridad, los estrictos programas de mantenimiento y la capacitación sistemática del personal operacional, tienen que ser formar parte vital en la industria, en particular en las operaciones, justamente para minimizar los riesgos y reducir al mínimo posible, la ocurrencia de accidentes.

Quienes hemos seguido de cerca la pista de lo que ha sucedido en PDVSA, durante los años recientes, podemos afirmar, sin temor a equivocarnos, que la alta tasa de accidentes ocurridos durante el lapso 2003 – 2012 contrasta, de manera indiscutible, con las bajas tasas de accidentes de período 1976 – 2002.
Esta data es, sin duda, un importante elemento de juicio que nos permite inducir que no se ha cumplido con los programas de mantenimiento, ni con los protocolos de seguridad y tampoco con la capacitación laboral. Por lo tanto, aun cuando no podríamos ser concluyentes, existe una muy razonable inclinación a señalar que en este trágico y lamentable accidente, han podido confluir elementos relacionados con la violación de los parámetros de mantenimiento, seguridad y capacitación.

Esta aproximación la podríamos sustentar con datos importantes que hemos manejado y algunas consideraciones contenidas en un informe publicado muy recientemente en el Nuevo Herarld titulado: “Risk Improvement Recomendations Update Report” elaborado para la reaseguradora QBE con fecha marzo 2012:

a. La refinería de Amuay tenía previsto en el plan original del 2011 la ejecución de 9 mantenimientos. De este plan solo se efectuaron 2. Por cierto, con grandes por problemas con los materiales que ocasionaron importantes retrasos.
b. Algunos estudios realizados en la empresa indican que tan solo 20% del personal está involucrado en actividades de seguridad industrial.
c. En las 10 unidades de la refinería de Amuay, los días de parada no programadas se incrementaron 70% con respecto al 2010, al pasar de 375 a 639 días.
d. Según el referido informe, “durante el 2011, 222 incidentes fueron reportados, incluyendo alrededor de 100 incendios, muchos de los cuales produciéndose en trincheras de tuberías contaminadas”.
e. Señala también el informe, “aun cuando hay un buen procedimiento para la investigación de incidentes, debemos resaltar que pocos de ellos habían progresado más allá de la etapa de establecer una comisión de estudio y sólo nueve de ellos habían sido declarados ‘cerrados’, con las recomendaciones ejecutadas”.

Sin embargo, a la espera de la investigación y el dictamen de los ingenieros forenses que confirme o refute, nuestra propensión a identificar como posibles causas del accidente, los elementos mencionados, hay dos aspectos que si podemos afirmar, si temor a ser tachados de irresponsables: en primer lugar que el plan de contingencia, ante la emergencia no funcionó y, en segundo terminó, PDVSA permitió la violación de la zona natural de seguridad de la refinería.
De acuerdo con las declaraciones del señor Jesús Luongo quien funge como Gerente del Complejo Refinador de Paraguaná, aunque más bien parece un comisario político del PSUV, la fuga de gas se detectó alrededor de las 12 de la noche y la explosión ocurrió a la 01:10 de la madrugada. De acuerdo con su versión, la cuadrilla de recorrido identificó una filtración y una nube de gas a esa hora, trataron de cerrar la válvula, pero no lo lograron. Luengo añadió que uno de los miembros de la cuadrilla regresó a ponerse un “traje especial” para volver a intentar cerrar la válvula, mientras otros miembros de la cuadrilla fueron a la autopista para detener el tránsito.

La pregunta inmediata es, ¿por qué ninguno de los miembros de la cuadrilla notificó de inmediato al supervisor de control de procesos de la refinería sobe lo sucedido? y, si así lo hicieron, ¿por qué no se alertó desde allí ni a los bomberos de la refinería (primera llamada obligatoria), ni al Comando de Guardia Nacional (segunda llamada obligatoria).

Pero, si así lo hicieron desde sala de control de procesos, nos preguntamos ¿por qué los bomberos no acudieron al llamado de manera inmediata, ¿por qué los efectivos de la Guardia Nacional no procedieron a tomar el control de la seguridad de la refinería, ¿Por qué no desalojaron el Comando y dieron la orden de evacuación de las viviendas y de Puramin?, ¿por qué la guardia no tomó la autopista para impedir el transito de vehículos no autorizados?, ¿por qué lo operadores de la cuadrilla, abandonaron sus puestos para ir a ponerse un traje o detener el transito?, ¿por qué no sonó la alarma y si sonó, porque nadie la oyó?
Muchas preguntas que deberán ser respondidas, transcurrió cuando menos, 1 hora con 10 minutos, desde que se detectó la fuga hasta que se produjo la explosión, tiempo suficiente para evitarla con los bomberos bombeando agua sobre la nube de gas o, cuando menos, haber podido evacuar la zona reduciendo el numero de fallecidos y heridos.

La primera recomendación de un plan de contingencia es cumplir lo establecido, vale decir notificar a los bomberos y a la guardia, permanecer en su puesto de trabajo hasta exista una orden de evacuación y alertar de manera eficiente a la población.

Sin duda, si el plan de contingencia se activó, no funcionó, lo cual es una falta grave, pero si no se activó, es peor aun. Esperaremos los resultados de la investigación.

Por otro lado, entendemos los guardias y los trabajadores estaban en funciones inherentes a sus cargos y lo sucedido fue consecuencia del accidente y de un plan de contingencia que no funcionó, pero, nos resulta inaceptable, imperdonable e inexcusable que haya víctimas ajenas a las operaciones que residían en viviendas construídas dentro de la franja de seguridad de la Refinería de Amuay.
Esto, sin duda, demuestra la desidia, negligencia y falta de conciencia de la gerencia de PDVSA y las autoridades oficiales que lo permitieron o, sencillamente, lo toleraron. Ellos son responsables directos de esas muertes, porque nunca debieron ocurrir de haberse cumplido con los protocolos de seguridad.

No debemos permitir que este hecho catastrófico quede impune, tal como ha ocurrido recientemente con los continuos derrames de crudo o el hundimiento de la plataforma Aban Pearl, por solo citar dos ejemplos. Rafael Ramírez como presidente saliente de PDVSA y Jesús Luongo como gerente saliente del CRP, son responsables directos de lo ocurrido, en particular de los muertos y heridos ajenos a la operación. Y Hugo Chávez, el mayor responsable por mantener en la presidencia de PDVSA a Rafael Ramírez.

Hechos como el ocurrido en Amuay, también deben considerarse a la hora de decidir sobre cuales el modelo que queremos, el del retroceso, vinculado al accionar político, la desprofesionalización de la Industria, la improvisación, la falta de información y la mentira, o el del progreso, identificado con el accionar de una empresa del Estado fiel al cumplimiento de misión, una empresa que premie la preparación y el conocimiento y que constantemente capacite a todo el personal, donde se cumplan las normas y los procedimientos, donde se informe oportunamente sobre los planes y resultados, una empresa con una cultura de rendición de cuentas.

Tragedia electroenergética

José Aguilar

Este accidente es el peor en refinerías a nivel mundial en los últimos 25 años. Esta tragedia tiene su concepción desde mucho antes

A menos de 35 días de la elección, Venezuela se enluta inmerecidamente por negligencia del fracasado de Miraflores. Esta tragedia tiene su concepción desde mucho antes. La Ley de Seguridad Industrial dice: Una catástrofe es precedida de muchos avisos y advertencias ignoradas. Este accidente es el peor en refinerías a nivel mundial en los últimos 25 años. Por doquier se ve la falta de mantenimiento en la nación. Esta falta de mantenimiento no perdona, o lo pagas ahora o lo pagas después, pero se paga.

Sabe Dios si con el presidente Chávez en el poder seis años más, y con un gobierno antitransparente que desde la palestra del poder opera con opacidad, sin ética y plena impunidad, cuántos "Amuay" más están en gestación. Catorce años de fracasos promoviendo el caos en vez de la ingeniería, despreciador del conocimiento por el facilismo, regalador de nuestros cada vez más escasos recursos, negándole a la nación los dineros para el mantenimiento de su infraestructura.

La negligencia está en Miraflores, la incapacidad gerencial no tiene parangón. Con lo sucedido en Amuay se demuestra una vez más que el Presidente es incapaz de rectificar. Ratifica nuevamente al ministro Rafael Ramírez, corresponsable de desastres inéditos de la revolución: la crisis eléctrica (2003 a 2010), Pudreval (2010), Ecocidios al ambiente en Oriente (2011), mucha sangre en la industria y ahora en Amuay (2012).

Venezuela se cae a pedazos, requiere un cambio, ya que el Presidente ante todos los desastres que han acontecido en su gobierno, no cambiará. Cambio político, colmado de capacidad y ética para arreglar los platos rotos de quien irrefutablemente nos dejará un país peor que el que recibió, es el gran reto de nuestra generación. Por nuestros hermanos caídos en Amuay y tantos más, Venezuela lo implora, atendamos su llamado.

¡Manos a la obra, que sí se puede!

Carta abierta a Ivan Freitas y a Angel Estebán (Director de Seguridad de PDVSA)


  Magda Mascioli G. - 

Carta abierta a Ivan Freitas, presidente del sindicato de trabajadores de pdvsa y a Angel Estebán, director ejecutivo de seguridad industrial de pdvsa.


Pero antes de dirigirme a ellos, quiero dejar esta nota preliminar a mis Conciudadanos Venezolanos, nacidos y adoptados; con franelas de todos los colores, incluidas rojas:

Esta carta la estoy escribiendo el día de hoy, luego de dejar pasar 4 días de la tragedia que aun no se termina. Tragedia que acompaña a muchas otras que mantienen a Venezuela doblegada  por los cuatro costados; doblegada, sí, más NUNCA arrodillada. Tragedia que por sus dimensiones, por sus características, arropa a las demás porque ésta se hubiera podido evitar.

Esperé cuatro días con el propósito de aliviar, si es que acaso eso se pudiera, la exacerbada indignación y la gran tristeza que me arruga el corazón. 

No sé cuál de las dos es más grande, pero me temo que lo es la indignación. Cuidado, no es rabia… es ¡Indignación! Hay diferencias.

No la escribo como ex - trabajadora de PDVSA (24 años), aun cuando no soslayo esa verdad, sino que lo hago como Ciudadana Venezolana. 

Ciudadana Venezolana que no tiene voz más que la propia. Ciudadana Venezolana testigo y victima, como todos los venezolanos, de los resultados de tanta indolencia e irresponsabilidad. Ciudadana Venezolana testigo INCRÉDULO de tanto cinismo, de tanto caradurismo, de tanta burla.   

No milito en partido alguno al igual que la gran mayoría de los venezolanos, razón por la que no obedezco líneas de nadie. Así, digo lo que ningún político dirá por miedo a perder algo; y escribo lo que, estoy segura, muchos Ciudadanos de a pie como yo piensan, se preguntan, sienten, pero no dicen.


Ahora, al punto.
Me dirijo a primer lugar a ud. Freitas, muy brevemente. No lo conozco, pero tengo entendido que es empleado de Pdvsa desde hace muchos años, ya que uno de los puntos que lo hace sentir muy orgulloso es que se quedó dentro en el 2002.  

Escuchaba sus declaraciones en Aló Ciudadano cuando informaba sobre las fallas graves que, según sus propias palabras, venían desde mucho antes del 2010. Muy claras sus exposiciones… pero tardías. 

Cuando Castillo le preguntó: ¿Qué sintió usted cuando explotó Amuay?  y seguidamente hubo un corto silencio, LE JURO que yo esperaba, de corazón, que usted dijera, como mínimo, que siente ¡VERGUENZA! Pero muy por el contrario, su respuesta fue: los que trabajamos en pdvsa NO TENEMOS LA CULPA de lo sucedido. 

Le confieso que si Ud. hubiera dicho que sentía un atisbo de VERGUENZA, le hubiera concedido, no se… ¡algo...! Pero era demasiado esperar.
Y entonces yo le pregunto Freitas Si no son ustedes los responsables ¿Quién o quiénes lo son? 

Nadie responsable entonces. Los muertos al hoyo, las cenizas de los desaparecidos a los escombros y la función debe continuar tal como dijera su jefe RESPONSABLE MAYOR junto a Ramirez. 

Nada más con usted Freitas. Eso es lo único que le voy a decir. No porque no tenga más que decirle o preguntarle, sino porque, sencillamente un individuo como usted ¡No vale la pena!

En cuanto a ti Angel Estebán. Sí… ¿qué te parece? Todavía recuerdo tu explicación de que no es Estéban sino Estebán. 


¿Qué puedo decirte o preguntarte a ti Angel? Despues de tantos años de trabajo juntos en Intevep ¿Qué crees que puedo preguntarte? ¿Qué podrías explicarme si estuviéramos en la Gerencia de Protección Integral de Intevep y esta tragedia hubiera sucedido en otra parte? ¿Qué me dirías? ¿Qué informe levantarías si te pidieran tu opinión como experto, como técnico, como químico, como bombero, como Empleado Petrolero Angel. 

Si. Como Empleado Petrolero, NO como empleado de Chavez sino como EMPLEADO PETROLERO DE PETRÓLEOS DE VENEZUELA, S.A.? 

¿Qué me dirías en base a tu entrenamiento de años Angel en los que estuviste al frente, junto con Freddy, en entrenamientos enseñando a los trabajadores sobre protocolos de seguridad? Aquellos entrenamientos en los que había NORMAS que cumplir hasta por el personal de mantenimiento? ¿Qué tienes que explicar acerca del ORGULLO que representaba para los trabajadores petroleros el acumular millones de horas hombre sin accidentes incapacitantes? 

¿Te acuerdas del CEPET Angel? ¿Qué les explicarías a los venezolanos sobre lo que era el CEPET?

¿Qué presentación en tu laptop de última generación presentarías sobre los paros programados en las refinerías? ¿Qué enseñanza acerca de los protocolos de seguridad? ¿Qué referencia darías de Planta Piloto, Norte 6, en Intevep? 

Y con respecto a eso Angel ¿Esa planta todavía existe? ¿En qué condiciones?
¿Qué seguridad le das tú como Director Ejecutivo de Seguridad Industrial de Pdvsa a la gente de Los Teques acerca del funcionamiento de Planta Piloto, Edificio Norte 6 en Intevep? 

¿Les garantizas a los tequenses la misma seguridad que les garantizaste a los paraguaneros?

¿Sabes de quién me acordaba ayer luego de leer tu lamentable y escueta declaración Angel? Me acordaba de Freddy González (qepd);  -Freddycucio- como lo llamaba yo cariñosamente y ante cuyo llamado él regalaba su franca y gran sonrisa con un gran brillo en sus ojos verdes. 

¿Qué crees tú que te diría Freddy al día de hoy Angel? ¿Qué crees que te diría al saberte como el flamante Director Ejecutivo de Seguridad Industrial de pdvsa? ¿Cuál crees que sería la mirada que te regalaría ante lo sucedido en Amuay? ¿Qué crees que te preguntaría? ¿Qué explicaciones crees que te exigiría como Bombero Profesional y como experto en la materia?

Y tus hijos Angel. Hermosos. A quienes vimos crecer y asistir a los eventos en Intevep.. ¿Qué les explicas viéndolos a los ojos?

Mejor dicho Angel… ¿Qué le dices a esa persona a la que ves todos los días en el espejo cuando te estás afeitando? ¿Le puedes sostener la mirada?

Estaba viendo la foto que enviaron por correo de tu persona Angel. La califiqué como: El antes y el despues. No importa la vestimenta (en una el flux, en otra la braga roja). 

La vestimenta, como dice el refrán, no hace al monje. ¿Tú sabes lo que en realidad me dejó perpleja Angel? La metamorfosis de tu rostro. De aquel rostro sonriente, amable, risueño no queda ni el vestigio.  


Razón tenía mi mamá, a quien conociste, al decir que el rostro es el reflejo del alma. 


Y mi mamá también decía:

EL DÍA EN QUE TENGAS QUE BAJAR LA MIRADA ANTE LA PERSONA QUE TE ESTÁ VIENDO DESDE EL ESPEJO… ESE DÍA… ¡LLORARÁS! PORQUE SABRÁS QUE TU CONCIENCIA NO TE ABANDONA. 

Te envío un pañuelo Angel... 
¡para que seques tus lágrimas!

miércoles, 29 de agosto de 2012

Politizaron Amuay

CAROLINA GÓMEZ-ÁVILA |  EL UNIVERSAL(29-08-12)

Escribo en domingo.  Ayer desperté con ojos de espanto: había explotado Amuay.  El horror precede al dolor.  Y  la sensación de impotencia lo convierte en rabia.  Pedía claridad mental para los rescatistas, paz para los difuntos y pronta recuperación para las víctimas cuando, ante la escalada en las cifras de heridos y fallecidos, alguien solicitó que no se politizara el tema.

Un pito sonó en mi memoria.  Era abril de 2002.  Despedían, en cadena nacional, a siete ejecutivos de la petrolera estatal.  Era un acto político.  El escarnio era una amenaza y una demostración de poder.  Cerca de veinte mil trabajadores fueron botados a continuación.  No por ineficiencia.  Ni por falta de preparación para el desempeño de sus cargos.  Se puede estar de acuerdo o no con lo que dijeron e hicieron, pero el hecho es que se les despidió por estrictas razones políticas, violando sus derechos humanos y la Constitución Nacional.  Se llama discriminación.

La sustitución de semejante cantidad de personal tenía que hacerse a toda velocidad.  Los despedidos estaban entre los más destacados por sus conocimientos y experiencia; los sustitutos, no tanto.  De modo que el criterio principal de selección fue la "lealtad al proceso". Discriminación política para botar, discriminación política para contratar.  Fue así que un montón de trabajadores, menos preparados que sus predecesores, comenzó a operar y a tomar decisiones en áreas que afectaban la extracción y refinación del petróleo. La primera consecuencia, no superada todavía, fue una sustancial reducción de nuestra producción diaria de barriles de crudo. Las otras, se cuentan en "accidentes" de variados tamaños y consecuencias.  Se llama incompetencia.

Para completar, en un entorno de decisiones "fieles a la revolución", y según cifras públicas, se redujeron las acciones de mantenimiento y prevención, tanto de personas como de maquinarias e instalaciones.  La falta de cuidado oportuno de los bienes de la nación es delito administrativo.  Y esto es independiente de lo que se haya hecho con el dinero de la partida correspondiente.  Es igual si atentaron contra el presupuesto, o no.  Se llama corrupción.

Espero que ahora, en defensa de sus vidas, los trabajadores nos digan si también hubo violación de otras leyes por parte de la petrolera que maneja el gobierno. Como de la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo, por ejemplo. Pero por lo dicho, considero que estas víctimas, venezolanos todos, lo son de quienes practicaron la discriminación, incompetencia y corrupción de manera continuada.

... "cuando yo agarré el pito aquel en un Aló Presidente y empecé a botar gente, yo estaba provocando la crisis".  Hugo Chávez Frías.  Presidente de la República Bolivariana de Venezuela.  15 de enero de 2004.

Me queda claro que así se politizó la tragedia de Amuay

Inspeccion a Seguridad en Amuay en marzo 2012

El informe a continuacion se refiere a una una inspección externa realizada en entre el 5-8 de marzo del 2012 por la firma RJG Risk Engineering para la compañía de reaseguros QBE en las dos refinerías del Complejo Refinador Paraguaná -Amuay y Cardón-.

Este tipo de inspeccion es realizado periodicamente por empresas especializadas (nacionales e internacionales). Tambien la antigua PDVSA tenia comites denominados SOL (Seguridad, Orden y Limpieza) conformados por personal de distintas unidades de PDVSA que realizaban inspecciones y recomendaban acciones para mantener el estandar de seguridad de las instalaciones, del personal y de las comunidades, y que ayudaban al desempeño de la Gerencia de SHA (Seguridad, Higiene y Ambiente).

Del informe se desprende que habian una serie de aspectos a mejorar y modificar en las refinerias de Amuay y Cardon para llevarlas al standar internacional de este tipo de instalaciones. Tambien indica que el año anterior (2011) las instalaciones habían registrado al menos un centenar de incendios y advertía sobre una inadecuada protección contra incendios en las instalaciones, equipos a ser reemplazados, poco conocimiento de las instalaciones por el personal y existencia esporadica de “nubes de vapores volátiles” en las instalaciones.

En definitiva, el accidente en Amuay el 25-08-12, tenia alta probabilidad de ocurrir, es decir, es todo "Un accidente anunciado".

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Informe Amuay

martes, 28 de agosto de 2012

Guayana entrampada

Guayana entrampada

PDVSA deberá importar combustibles por incidente en Amuay

Daniela García. Diario La Verdad (28-08-12)

Nelson Hernández, experto en materia energética, asegura que el parque de refinación, sin Amuay, no puede suplir la demanda local de combustibles. Aunque aún cuenta con inventario, la petrolera deberá apoyarse en la compra de carburantes para cubrir el consumo interno

Venezuela tiene un inventario de combustible que permite cubrir temporalmente los requerimientos del mercado interno, pese a la explosión que dejó inhabilitada el sábado a Amuay, la mayor refinería del país, ubicada en el estado Falcón.
Pero la central más grande no se podrá poner en marcha de manera inmediata, por lo que la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) tendrá que recurrir a la importación de carburantes para satisfacer la demanda local, asegura Nelson Hernández, experto en energía.

El consumo de gasolina en Venezuela se ubica en 290 mil de barriles diarios (mbd), principalmente por el parque automotor; mientras que el de diésel asciende a 181 mbd por el sistema eléctrico, el transporte público y de carga y el sector agrícola.

Desde el incidente, Rafael Ramírez, presidente de la estatal, asegura que el país tiene una reserva de 2,8 millones de barriles de combustibles, que, según sus cuentas, alcanzan para satisfacer la demanda por 10 días, sin precisar la cantidad de reserva por cada carburante.

La refinería de Amuay, que puede procesar hasta 644 mil barriles de crudo por día, contribuye con 68 por ciento de los volúmenes refinados en el país, lo que da una producción de 150 mbd de gasolina y 165 mbd de diésel, así como de otros combustibles como jet fuel y fueloil.

El resto de las plantas de destilación venezolanas, que en conjunto tienen una capacidad para tratar 700 mil barriles por día, pueden suministrar 80 mbd de gasolina y 140 mbd de diésel, entre otros derivados como lubricantes.
"Las refinerías distintas a Amuay no pueden satisfacer la demanda del mercado interno, por lo que PDVSA tendrá que importar ambos combustibles", asegura el ingeniero.

"El almacenaje del país realmente garantiza ocho días de consumo de gasolina y 13 de diésel. Si no se repone, por incidentes como el de Amuay, hoy el inventario de gasolina debe estar reducido a seis días y el de diésel a 11. Para cubrir el consumo habrá que importar".

Las cuentas de Hernández contrastan con las de Eulogio del Pino, vicepresidente de PDVSA, quien asegura que sin incluir a la central afectada, el complejo de destilación venezolano tiene una capacidad para suministrar los combustibles que requiere el mercado interno.

"Sin incluir Amuay, el parque refinador del país tiene una capacidad de procesar 735 mil barriles diarios de crudo, mientras el consumo de gasolina en Venezuela es de 280 mil barriles", afirma el funcionario, que no incluye la demanda del resto de los carburantes.

Importaciones
La compra de combustible en el exterior no es desconocida para PDVSA, que solo entre enero y mayo de este año adquirió en Estados Unidos 37 mil 600 barriles diarios de carburantes, de acuerdo con cifras de la Agencia Internacional de Energía.

La importación de gasolina no tiene que representar un inconveniente para la estatal desde el punto de vista operativo, pero sí puede representar un aumento de sus gastos.

Si Petróleos de Venezuela compra combustible en el exterior, tendrá que cancelarlo a precios internacionales para luego venderlo subsidiado en Venezuela.

En mercados internacionales el litro de gasolina se paga en un promedio de 1,5 dólares (6,45 bolívares fuertes), mientras que en el país tiene un precio controlado en 0,097 bolívares fuertes la de 95 octanos.

Proceso
Hernández indica que Amuay no se puede reactivar una vez que se apaguen las llamas que aún persisten en el lugar de la explosión, pues primero se debe hacer un chequeo para conocer la situación de toda la infraestructura.
Pese a la magnitud del estallido del sábado, Ramírez promete reactivar la central de destilación en 48 horas, una vez sofocado el incendio de los dos tanques que quedan encendidos.

"Aunque las unidades de refinación estén alejadas del lugar del accidente -el patio de almacenamiento-, se debe hacer una revisión por dos razones: por la onda expansiva de la explosión y las altas temperaturas generadas por el incendio, que pueden fracturar o fatigar metales".

Normalidad en los despachos
La Federación de Asociaciones de Empresarios de Hidrocarburos (Fenegás) difundió un comunicado dirigido a la colectividad, a través del cual informa que la distribución de combustibles a las estaciones de servicio del país se desarrolla con total normalidad.

"Contamos con inventario suficiente para abastecer entre dos y siete días de ventas regulares, por lo que solicitamos mantener la calma y no hacer eco de informaciones falsas que generan compras nerviosas de combustible, en pro de mantener el nivel de reserva que se ha logrado mantener en los últimos días".
La Verdad hizo un recorrido por diferentes establecimientos de Maracaibo, a través del cual se constató el abastecimiento de carburantes. Los operadores descartaron las compras nerviosas y aseguraron que los despachos se hacen con regularidad.

Los expulsados

Eddie Ramirez

Todas las dictaduras han expulsado de la administración pública, de las empresas del Estado y de las filas castrenses a quienes no se han doblegado. Durante el período civil 1958- 1998 también se cometieron algunas injusticias, pero más para disponer de un “cargo de confianza” y favorecer a un compañerito de partido, que para sancionar al desplazado por tener otra filiación política.


Pérez Jiménez expulsó de las Fuerzas Armadas a numerosos oficiales que al caer la dictadura fueron reincorporados por Larrazabal y Edgar Sanabria. Los más jóvenes o quienes tenían el curso de Estado Mayor siguieron la carrera militar y algunos llegaron a ocupar altos cargos. Las Fuerzas Armadas aceptaron estas reincorporaciones, aunque no faltaron críticas a los “reencauchados”. Otro grupo fue reincorporado, ascendido al grado inmediato y pasado nuevamente a retiro previa compensaciones laborales. Ocurrieron casos similares de profesores expulsados y luego reincorporados con todos sus derechos. El punto a destacar es que el Estado venezolano reconoció y compensó los atropellos del dictador.

A Henrique Capriles le corresponderá decidir sobre los miles de ciudadanos que fueron expulsados de la administración pública por haber firmado la solicitud de referendo al mandato presidencial; también aquellos que por razones ideológicas fueron despedidos, así como los que se sumaron a huelgas y los militares que fueron pasados a retiro por haber desobedecido órdenes de atropellar a los ciudadanos o por no declararse “socialistas, revolucionarios y chavistas”. Esta es una deuda del Estado que el nuevo gobierno deberá honrar. Desde luego que es un tema que hay que abordar con prudencia y por etapas.

Los oficiales de alta graduación ya no regresarán a la Fuerza Armada, pero hay que reconocerles su jubilación, cuando se les haya negado, y otros derechos laborales. Los oficiales subalternos deberían tener la opción de regresar o de pasar a retiro con el grado superior. En cuanto a los trabajadores despedidos ilegalmente de las empresas y organismos del Estado, lo procedente es reengancharlos y reconocer los derechos laborales violados. Seguramente muchos ya cumplen con los requisitos de jubilación o están en otras actividades atractivas. En todo caso es imprescindible captar personal clave si queremos aumentar la producción de estas empresas. No es tarea fácil, pero hay un camino.

Como en botica: Felicitamos al Frente autónomo en defensa del empleo, el salario y el sindicato (Fadess), por la exitosa jornada Juicio Laboral al Gobierno, con denuncias concretas de atropellos a los trabajadores. Mientras el lenguatón dice que aumentará la producción petrolera, Rafael Ramírez predica reducción en el seno de la OPEP. Los asesinatos de ciudadanos comunes, de policías y de presos son responsabilidad directa de quien solo le preocupa su permanencia en el poder. ¡Bravo por Capriles, su mensaje e infatigable actividad !

El Crimen de Amuay.


Guaicaipuro Lameda


El incidente ocurrido en el complejo refinador Paraguaná  no es un mero accidente, más bien es la consecuencia inevitable de una situación continuada y agravada de la cual el mundo ha sido su testigo presencial. También entiendo que esa es una tragedia que nadie desea que ocurra o que se propicie deliberadamente, a menos que fuese una acción terrorista y ese no es el caso.
En mi opinión, la tragedia se fue construyendo paso a paso mediante un cúmulo de hechos que dan cuenta del proceso de desviación y deterioro institucional impulsado durante la última década por unos directivos y ejecutivos que se esfuerzan por mostrar y forzar la lealtad de la gente a un proceso político poniendo de lado las necesidades reales del negocio petrolero. Esta es la consecuencia de poner lo político por encima de lo económico en un negocio de elevadísimo riesgo para la seguridad de las personas, de la infraestructura y del entorno que le rodea.
En la última década, PDVSA pasó de ser una corporación de negocios para convertirse en una organización “ROJA, ROJITA”, lema que traiciona el compromiso adquirido en discurso presidencial pronunciado en la propia sede de PDVSA el 10 de noviembre de 2.000: “PDVSA no es una empresa para hacer proyectos políticos o personales, como lo fue hasta hace poco. Eso hay que dejarlo atrás….”
Esa traición “Roja, Rojita” empujó para darle mayor importancia al vestir de rojo, a sustituir con rojo al color identificaba la corporación, a poner el tinte político por encima de lo medular del negocio y a distraer la atención de ejecutivos y trabajadores en tareas que, siendo importantes en lo social, actúan como distractores que contribuyen con la ocurrencia de paradas no programadas en las plantas y accidentes recurrentes que presagian un siniestro mayor. Así ocurrió.

Para darnos una idea del riesgo al que está sometida la península de Paraguaná, basta con considerar que el complejo refinador tiene una capacidad instalada para procesar 940.000 barriles de crudo por día, ese flujo es equivalente a llenar totalmente el tanque de gasolina a unos 45 vehículos por segundo, durante las 24 horas del día, los 365 días del año. Ese es el volumen de material combustible o explosivo que podría estar en movimiento en cualquier momento. Ello sin contar con el volumen de hidrocarburos que se encuentra almacenado en diferentes sitios como parte indispensable del proceso hasta despachar el producto terminado. Ese sólo hecho exige a los ejecutivos de PDVSA la obligación de garantizar la excelencia en materia de seguridad, sistemas de alarma ante el más mínimo evento que presagie un accidente y mecanismos de control y reacción inmediata que minimicen las posibilidades de ocurrencia de un accidente cada segundo, durante las 24 horas del día, los 365 días del año. No en balde esa refinería fue galardonada con reconocimientos por su excelencia en seguridad y por su prolongada operación sin ocurrencia de accidentes o paradas no programadas. 

Lamentablemente, eso se extinguió bajo el silencio y la subordinación a la solidaridad cómplice entre los camaradas revolucionarios de la PDVSA “Roja, Rojita” y de todo el poder externo que les apoya en esta tropelía.

En el fondo, esta tragedia es más de lo mismo que ocurre y se repite en diferentes áreas del país y que lamentablemente nos mantiene en vilo y a la espera de la próxima tragedia que ocurrirá cuando estalle otra de esas  “BOMBAS DE TIEMPO” que se pretenden ocultar, pero que se construyen ante los ojos de todos y con conocimiento de causa por parte de una jefatura política irresponsable que ha barrido con la esencia de las instituciones para convertirlas en sus frentes políticos que luchan por el control del poder y el reparto de un botín que se termina pagando con la vida de la gente. He allí la razón del delito, el de la omisión o la negligencia para para prevenir actuando a tiempo o anticipadamente. 

Para los aún incrédulos ante estos planteamientos, les refiero a tres tragedias. La primera,  se ha hecho cotidiana y ya no nos asombra, hoy día nos conformamos haciendo lo posible para que no nos toque. Los funcionarios con poder y recursos se rodean de escoltas, de vehículos blindados, se ponen chalecos antibalas y nos dicen que la situación es normal, que está bajo control o que está mejorando, pero no es así, basta con revisar las cifras oficiales sobre los muertos que ocurren a manos de la violencia armada, para ver que esta tragedia cotidiana es la más grande que vive el país, con una cuenta que supera a los 100.000 muertos en una década. La segunda, es la situación penitenciaria, denunciada inútilmente por veedores y víctimas cuyas voces, al igual que con toda otra denuncia, son acalladas por declaraciones  oficiales que hablan de tranquilidad, normalidad y control de la situación para luego arremeter contra esas voces acusándolas de promover mentiras y campañas mediáticas desestabilizadoras (http://www.youtube.com/watch?v=P869lIZ_hY4); sin embargo, la tragedia no se hizo esperar  y la violencia se apoderó de la cárcel de yare para que, según el parte oficial, ocurrieran 25 muertes y 43 heridos; este tampoco fue un mero incidente, también es la consecuencia no deseada pero inevitable de esa solidaridad cómplice entre camaradas  revolucionarios.  La tercera tragedia la constituye el colapso del puente de Cúpira donde, afortunadamente, hubo sólo daños materiales pero su ocurrencia es de significativa relevancia porque dejó al desnudo una peligrosa realidad. 

En el afán de construir el binomio ejército-pueblo, parece que el ejército olvidó su esencia y ante los ojos de cualquier analista en la materia, por poco preparado e inteligente que sea, queda claro que nuestro país es absolutamente vulnerable ante una amenaza militar. El discurso oficial y la omisión en acción para dar una solución inmediata y temporal hablan por sí solos. Ese Ejército, que se rasgó las vestiduras gritando patria, socialismo o muerte, no tiene la capacidad o la preparación para reponer un solo puente destruido y por tanto la fuerza de choque de sus tanques de guerra quedaría inmovilizada con solo derribar un puente en su ruta de avance. Imaginemos la tragedia que viviría el país si se concretara una de nuestras amenazas en la región suramericana y preguntémonos donde podría quedar nuestra soberanía, nuestra integridad territorial y cuál sería el bochorno al que nos veríamos sometidos ante la pérdida en una confrontación por intereses de vieja data. No contemos las bajas, porque en este caso hasta nos podrían derrotar sin dar batalla.

Dirijo mi mensaje de cierre a quienes tienen responsabilidades de ejecución, de investigación o de verificación y control en sistemas o procesos que podrían derivar en tragedia: Ustedes tienen la opción de actuar con honestidad y con dignidad para defender los intereses de la gente, y en estos casos estamos hablando de sus vidas, a veces sostener esa posición conlleva la renuncia o el despido honroso; también tienen la opción de sumarse a la solidaridad cómplice entre camaradas revolucionarios o, como me diría una vez uno de Ustedes, “entre bomberos no nos pisamos la manguera”, si deciden por esta opción, rueguen a Dios porque la próxima tragedia no los toque a ustedes o a su familia porque estas tragedias no discriminan. Probablemente Dios les perdone, pero no sé si los familiares de las víctimas podrán perdonarles.

A mi entender, las tragedias y los hechos ocurridos hasta ahora demuestran que para la revolución  las muertes ocurridas son sólo un accidente en la construcción de su ansiada patria nueva y no un delito con responsables: ¿Esperamos por el próximo?

lunes, 27 de agosto de 2012

Accidente Refineria Amuay (Video - Fotos)




PDVSA. Accidentes 2003-2012

PDVSA. Accidentes 2003-2011

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Más de 30 accidentes han afectado las operaciones de la industria petrolera en lo que va del año 2012

EL UNIVERSAL (25-08-12)
04-01-2012 Pdvsa informó que la unidad de Craqueo Catalítico Fluidizado (FCC) de la Refinería El Palito estaría fuera de servicio durante cinco días para corregir una falla en el Sistema de Válvulas Deslizantes.

05-01-2012 Trabajadores petroleros en la Refinería El Palito afirman que la parada de la unidad de Craqueo Catalítico Fluidizado (FCC) se debe a los deficientes trabajos de mantenimiento acometidos previamente.

07-01-2012 Reportan explosión de horno en refinería Cardón.

08-01-2012 Fallas eléctricas afectan operatividad de refinería Cardón.

08-01-2012 Petróleos de Venezuela notificó una parada preventiva del reformador de nafta de la refinería Cardón.

10-01-2012 Trabajadores reportan falla en Unidad de Destilación de Amuay.

13-01-2012 Un fallecido y nueve heridos tras hundirse embarcación en el estado Zulia.

14-01-2012 Dos trabajadores mueren y 22 quedaron heridos tras colisión entre una gandola y una buseta que transportaba personal de Pdvsa desde el Zulia a Caracas, para asistir a un acto presidencial.

17-01-2012 Explotó taladro petrolero de Pdvsa en la Gerencia Punta de Mata, sin que se registraran heridos o lesionados.

21-01-2012 Trabajadores petroleros del Complejo Refinador Paraguaná manifestaron su inconformidad con la inseguridad industrial y personal que aseguran padecer en las instalaciones de la refinería.

21-01-2012 Refinerías en Paraguaná operan a 63% de su capacidad.

22-01-2012 Reactivan unidad de destilación de refinería Amuay.

26-01-2012 Pdvsa afirma que el CRP opera a 79% de su capacidad total.

31-01-2012 Se inicia mantenimiento mayor programado en la Unidad Catalítica de la refinería Amuay.

04-02-2012 Activan plan de contingencia en Complejo Jusepín de Monagas tras la fisura de una tubería de crudo.

06-02-2012 Registran accidente en la refinería Cardón de Pdvsa, cuando una falla en las bombas de fondo de la planta DC-4 (Destilación Atmosférica) provocó un incendio que se mantuvo hasta la madrugada.

06-02-2012 Crisis de agua en Monagas por rotura de un oleoducto de transporte de petróleo de Pdvsa en Jusepín, que causó un derrame de crudo.

08-02-2012 Pdvsa inició las investigaciones por la explosión ocurrida en el taller de soldadura de su filial Empresa Nacional de Transporte, Región Oriente Sur, y que dejó un trabajador fallecido.

21-02-2012 Falla paraliza unidad catalítica de refinería Cardón.

22-02-2012 Falta de repuestos afecta operaciones en refinerías.

27-02-2012 Advierten sobre el deterioro de la refinería El Palito. Pdvsa confirma derrame de crudo en el río Guanipa, en el estado Anzoátegui.

02-03-2012 Paralizada planta de proceso de crudo en Refinería El Palito.

03-03-2012 Reportan derrame de 100 barriles de petróleo ocasionado por un buque de bandera bahameña, que se encontraba a kilómetro y medio (una milla náutica) de los muelles del Complejo Criogénico de Jose.

09-03-2012 A las 8:30 de la noche se produjo una falla en el sistema de aire de instrumento de Cardón, que ameritó detener de manera preventiva la refinería.

11-03-2012 Fallas afectan refinerías de Falcón y Anzoátegui.

01-04-2012 Tres personas resultaron heridas y una fallecida producto de una explosión en la estación principal de Petrocedeño en San Diego de Cabrutica, en el estado Anzoátegui.

26-04-2012  Reactivan destiladora catalítica en la refinería Amuay.

27-04-2012 Paralizada nuevamente Desintegradora Catalítica en Amuay.

28-04-2012 Fallece un trabajador de Petróleos de Venezuela y otros tres resultaron heridos en un accidente ocurrido en el Lago de Maracaibo.

06-05-2012 Activan plan de contingencia tras fuga de crudo en el estado Anzoátegui.

08-05-2012 Se produce derrame de crudo en el municipio Miranda, de Anzoátegui, donde está ubicada la empresa Petropiar.

10-05-2012 Ruptura de poliducto afectó línea de diesel en Monagas.

23-05-2012 Parada de la Planta Lubricantes durará unos tres meses.

28-05-2012 Tanquero petrolero Yare, operado por la estatal Pdvsa y recientemente entregado por Japón, tuvo que ser atendido de emergencia en un astillero de Bahamas por una rotura en el casco durante un incidente.

03-06-2012 Registran incendio en el pozo CM-26 en el estado Zulia, con un saldo de tres heridos y un fallecido.

07-06-2012 Se volcó una gandola de Pdvsa en la Carretera Troncal 9, cargada de gas licuado.

24-06-2012 La unidad de craqueo catalítico fluidizado (FCC) de la refinería El Palito, Carabobo, entró en su fase de prearranque el 28-06-2012, tras una parada programada de aproximadamente 20 días.

28-06-2012 Paralizada Amuay por falla en el sistema de enfriamiento.

04-07-2012 El mejorador de crudo pesado Petropiar, operado por Pdvsa y la estadounidense Chevron, detuvo sus operaciones por 46 días para someterse a mantenimiento y ampliar su capacidad de procesamiento en un 17 por ciento a 210.000 barriles por día (b/d).

04-07-2012 Una gandola de Pdvsa causa choque múltiple en la carretera Petare-Guarenas.

26-07-2012 Petróleos de Venezuela confirmó el incendio ocurrido el 25-07-2012 en las instalaciones del mejorador de crudo pesado de Petropiar en Anzoátegui.

05-08-2012 Se registró incendio menor en la refinería de Cardón.

25-08-2012 Incendio en la refinería de Amuay deja 41 fallecidos y más de 100 heridos.

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